Nací en Coronel Belisle, al crecer un día me encontré viviendo en una isla, y ahí comenzó para mí un momento difícil y oscuro, la comida en la isla se termino fue entonces cuando me llevaron a otro lugar, otro campo en donde podría recuperarme y tratar de subir unos kilos…pero mi mala racha aun no terminaba…junto conmigo, llega al campo una larga temporada de sequías.
A muy duras penas logre seguir en pie, fueron días largos y difíciles para mí, pero nunca deje de intentarlo. Y fui encerrado, una mañana en el corral me di cuenta que mis compañeros ya no estaban, todos habían marchado con nuevos dueños, solo quedaba yo, dando vueltas esperando ver a que otro lugar iría, siempre deseando estar mejor, Fue entonces cuando aparecieron unos locos que me miraban raro, como si yo fuera una joyita, como si yo fuera el caballo más lindo que jamás habían visto, justo en ese momento comencé a sentir que mi suerte quizás comenzaría a cambiar…esos locos intentaron subirme a un carro, pero yo siempre fui un poco desconfiado, rebelde, tal vez es porque siempre estuve acostumbrado a estar solo, a que nadie me prestara demasiada atención, o quizás por miedo a volver a sufrir hambre o malos tiempos; así que sin bacilar salte al corral y corrí, corrí y corrí…pero tuve que volver otra vez al puesto por hambre y sed, y ahí seguían estos hombres, esperándome y con gran paciencia al notar que al carro no me subiría, me llevaron a pie hasta Chimpay caminando al lado mío, recuerdo que cada tanto teníamos que parar, pues muchas fuerzas yo no tenía. Pero llegamos, el lugar era humilde y entre cantoneras y chapas encontré mi nuevo hogar, un pequeño box que para mí era un palacio, ya no tendría que soportar ni hambre, ni sequias, ni lluvias ni tempestades.
Y los días comenzaron a transcurrir con mucha más felicidad, todas las mañanas venia “poca” mi cuidador y con él muchos otros nuevos amigos, que me acariciaban, me rasqueteaban, me bañaban y trataban como a un verdadero rey, venían familias enteras a verme, mujeres niños y yo que tan acostumbrado estaba a pasar largas horas de tristeza o soledad no entendía bien que estaba pasando…porque me miraban así? Eso era cariño? Y me di cuenta que si….que definitivamente mi suerte había cambiado y para bien….
Yo al llegar estaba flaco, peludo, chiquito…y para ser sinceros un poco de vergüenza me daba, pues en el lugar había otros caballos muchos más lindos, altos, brillaban…y yo, bueno tenía mis encantos, pero no sabía bien cuales eran.
Y comenzaron los entrenamientos, -solo 4 meses tenemos decía “poca” mi cuidador, y con la preparación también llegaron las lesiones, de todo tipo. Pero la fuerza las ganas y el cariño con el que me trataban hizo que me pudiera recuperar.
Al mismo tiempo recuperé también mi identidad, estos locos me contaron que mi papa también era corredor y se llamaba Mister Blu y mi mama se llamaba Reina Piti.
Y los 4 meses terminaron y el día de la gran carrera tan deseada llego. Era un 13 de Diciembre del 2009, ahí estaban mis amigos, con los que compartimos el corral, los que se fueron antes que yo, cuanta gente reunida, no me daban los ojos para mirar…y todos preguntaban por mí, y yo me sentía un rey, como mis padres. La carrera era de 350m, todo un desafío, jamás había corrido tanto en mi vida, y gane!! Sí, gane por varios cuerpos. Qué locura tenía esa gente, todo gritaban, saltaban, me besaban, se fotografiaban conmigo, toda esa gente que me visitaba estaba ahí, todas las familias….y me di cuenta que jamás volvería a estar solo otra vez, Corrí todos los tiros desde 250m a 900m, gane catorce, una puestas y perdí doce y según estos locos es un buen promedio.
Fue ahí cuando decidí darme unas vacaciones, si me estrese un poco, o quizás simplemente necesitaba volver a correr un poco pero sin ninguna meta a la cual llegar y me fui al campo de unos amigos, primero de Riffo que rico que era el maíz que le robaba a Elba y la avena que me daba Oscarcito y luego de Pao y Gena, un campo hermoso a orillas del rio negro y ahí libre como el viento, suelto entre ovejas y vacas disfrute de unas largas vacaciones junto a otros amigos. Y siempre venía “Daniel” y Darío a visitarme, a traerme zanahorias, si no, traían golosina yo me encargaba de robarle a don García las galletitas de arriba de la camioneta…y así estuve un año de ocio total y alguna lesiones por hacerme el loco ja ja; hasta que una tarde volvieron los locos a llevarme, me contaron que el Stud sin mi ya no era el mismo, y que además la gente reclamaba mi presencia y hasta por las redes sociales se corría el comentario que yo volvía, era el mes de junio y estos locos hicieron toda una ceremonia para recibirme , están del coco, pero cuanta pasión que tienen por mí!! Y volví el mes de junio del 2013 y de ahí el 1 de agosto a correr a Gral. Conesa con muy poco tiempo de preparación y perdí pero los locos de siempre igual como si no pasara nada decían va bien va bien…el 23 de septiembre a puelche 400m.
Me falto poco para ganarla un salto más pero así son las carreras, 3 de Noviembre a vista alegre 700m y Gané, San Antonio 17 de Noviembre 600m Y GANE. Con estas dos volvió la locura en el Stud los muchachos dicen que volví… yo digo corro porque me apasiona doy lo mismo en un trabajo que en una carrera…
Disculpen si los aburrí es una pequeña historia que quizás se repita en algunos Stud con más o menos condimentos… ah, me olvidaba mi nombre es MISTER BANDA del STUD EL ORIGINAL de CHIMPAY la tierra de CEFERINO NAMUNCURA… espero verlos como cada domingo en lo que es esta pasión “NOSOTROS Y LAS CARRERAS”..
Daniel Oscar Hernández
